La psicología es una ciencia que se sirve de diversos métodos para ayudar a las personas. Estos deben estar validados científicamente, es decir, los profesionales nos aseguramos de que los métodos que utilizamos funcionan y son los más efectivos entre todas las opciones disponibles. Así, una técnica que ha mostrado ser altamente eficaz es la desensibilización sistemática.
Esta técnica suele utilizarse para las fobias o los miedos, por ejemplo, la típica fobia a los perros. Como su propio nombre indica, se trata de ir desensibilizando a la persona del estímulo que le produce ansiedad de manera sistemática. Se parte de la base de que el individuo trata de evitar el estímulo al que tiene miedo, en este caso, los perros. Siguiendo el ejemplo, si una persona ve un perro caminando hacia ella, su ansiedad se elevará, vendrán a su mente pensamientos del tipo “se está acercando mucho” o “me va a morder” y la persona cambiará de acera para evitar cruzarse con el perro. Al haber evitado el encuentro, la ansiedad disminuirá y esta conducta se verá premiada y, por lo tanto, reforzada.
A través del ejemplo se puede observar el siguiente esquema:
Lo que, en términos generales, equivaldría a:
La labor de los psicólogos es disminuir la ansiedad del paciente para que, a través de una serie de pasos, sea capaz de enfrentarse a los perros o a cualquier otro estímulo que le provoque ansiedad. Este abordaje dependerá tanto del estímulo en concreto como del contexto en el que se ha generado. Por ejemplo, no es lo mismo tener miedo a subirnos a un avión porque nos produce desconfianza estar en una aparato en el aire o porque una vez tuvimos una malísima experiencia en él. Así, el profesional será el que mejor nos guíe en el proceso de superar esos miedos que nos generan dificultades. Además, podrán ayudarnos a discernir si esta técnica es la que mejor se ajusta a nuestro caso o es más conveniente utilizar otra.